Joan Roca chef del restaurante "El Celler de can Roca" tres estrellas Michelin y considerado uno de los más prestigiosos restaurantes mundo, ha escogido Flor del Delta para realizar con exquisita maestría, las mezclas de nuestra flor de sal y escamas de sal con productos cuidadosamente seleccionados.
En estas salinas tradicionales obtenemos nuestra flor de sal (fleur de sel). Las salinas consisten en depósitos formados en la arena que paulatinamente son inundados por el agua de mar, la cual en el transcurso de la producción es constantemente sometida a estrictos controles analíticos.
En el proceso de evaporación del agua intervienen única y exclusivamente dos factores 100% naturales: la acción del sol y del viento. Este es el motivo por el que la cosecha de la Flor de Sal tiene lugar siempre entre los meses de abril y septiembre a diferencia de la sal marina común. Nuestra flor de sal es rica en matices gustativos y dieteticamente saludable, ya que su cantidad de cloruro sódico es claramente inferior.
Otro valor añadido en la sal de flor es su alto contenido en oligoelementos y minerales esenciales como el magnesio y potasio entre otros que la convierten en una sal gourmet.
La cristalización se produce al atardecer debido al enfriamiento de la salmuera y propicia la cristalización de pequeños cristales de sal rica en magnesio y potasio los cuales quedan en la superficie formando una fina membrana de diminutos cristales de sal.
La flor de sal se recoge manualmente y no pasa por ningún proceso industrial. La recolección se lleva a cabo todos los días que se dan las condiciones climáticas ideales para la producción del producto, día soleado, con alta temperatura y poco viento, si no se cosechara el grano se iría al fondo de la balsa una vez cristalizado y perdería sus propiedades, para su cosecha se usa una pala especial "lousse". Se deja secar al sol y al viento para obtener un producto puro, sin aditivos pero con una producción muy limitada. Por mucho tiempo que pase, no se apelmaza y se mantiene con sus propiedades intactas.
La flor de sal es la sal más saludable ya que es la más baja en cloruro sódico.
Su alta riqueza en los minerales existentes y disueltos en el agua de mar, y en especial su alto contenido de cloruro magnésico y de cloruro potásico, acentúa e intensifica el sabor de los alimentos.
Igualmente y debido a su origen marino y a su especial cristalización, la flor de sal, contiene el 80 % de los oligoelementos necesarios que necesita nuestro organismo, por lo que podemos afirmar que una dieta con sal de flor, es una forma sana de evitar tener que complementar nuestra alimentación con suplementos minerales.
